Obi aparecía en Saw II como uno de los prisioneros en la casa de Gas Nervioso. Fue el que se quedaba callado en el fondo mientras los otros discutían. Sólo habló cuando el sobre con su nombre fue encontrado. Se reveló por su propia prueba individual en la casa que fue él quien secuestró a los otros para Jigsaw, pero no se supo la manera en que lo hizo y ni siquiera cómo fue que él terminó en la casa. Su prueba le habría permitido conseguir dos antídotos para el gas venenoso que había en la casa y que era respirado por los prisioneros. Él tenía que arrastrarse en un horno y agarrar las dos jeringas en las cadenas de adentro, una que era un regalo a él y el otro para que la donara a alguien. La segunda aguja era una
trampa que cerraba la puerta y encendía el horno. Esta trampa parecía ser apropiada para Obi ya que según el comentario de Saw II, se decía que era un incendiario. Él terminó muriendo quemado cuando intentó arrastrarse a través de una ventana rota en el otro lado del horno pero no alcanzó a salir ni a sacar ninguna de las jeringas. El número en el cuello de Obi era un 11 verde. Luego se descubre que lo único que tenia que hacer era cerrar una llave de gas que se encontraba al fondo del horno, la cual era señalada por un dibujo del diablo, finalmente este tristemente murio.
Obi también tuvo un cameo breve en Saw III en donde se lo puede ver en una escena retrospectiva que tiene Jigsaw después de su cirugía de cerebro. En Saw V se lo muestra inconsciente, mientras Hoffman y Jigsaw preparan la casa para Saw II y en Saw: The Videogame aparece como víctima de Jigsaw para el detective Tapp. Estaba emocionado por la trampa de un horno muy grande para ser un aprendiz ansioso, según Tapp debía retirar el gas para que Obi no muriera quemado. El le suplicaba que parara, al salvarlo le dijo que esa prueba era para el y Tapp lo encontró demente. Poco después lo abandonó diciéndole que debía y tenia que superar su prueba, después aparece en Saw II.